La farmacogenética es el área de estudio en la ciencia genómica encargada de estudiar la respuesta de cada persona ante diferentes fármacos en función de sus genes. Esto se observa atendiendo a las variaciones genéticas que se producen. El término proviene de “farmacología” y “genética”.
Se considera que la farmacogenética – y, en un término más amplio, toda la farmacogenómica – es una de las grandes claves para “prescribir la medicación adecuada para cada paciente, según sus polimorfismos genéticos”.
Diferentes respuestas ante fármacos
La experiencia clínica muestra que los fármacos que funcionan bien en algunos pacientes pueden resultar mortales para otros. Estas diferencias pueden deberse a:
- Factores endógenos: o propios del sujeto. Algunos de éstos son la edad, el sexo y, el más determinante, su base genética.
- Factores exógenos: o externos; como la dieta, el alcohol u otros químicos que pudiera introducir en su organismo, como medicamentos o agentes xenobióticos (como el café).
Sin embargo, el factor que más influye en la efectividad y toxicidad de un fármaco son los genes. Es cierto que – según está estudiando la epigenética – la dieta y los condicionantes ambientales pueden influir activando o silenciando genes; pero su influencia es menor en comparación con la relación que existe entre el código genético del núcleo de las células de un paciente y su respuesta ante medicamentos.
¿Por qué es tan importante la farmacogenética?
No existen dos personas genéticamente iguales. Incluso en los gemelos, inicialmente idénticos, ocurren alteraciones en su información genética a lo largo de su vida. Esto provoca que la respuesta a los medicamentos sea también diferente en cada uno.
Históricamente, esto ha representado siempre un problema en el tratamiento clínico. Esta es la razón por la que resulta relativamente incierto el nivel de éxito que una prescripción médica tendrá. O sus posibles efectos adversos. Sin embargo, gracias a la aparición de la farmacogenética, a mediados del siglo XIX, se abrió un nuevo campo de estudio que permitirá personalizar el tratamiento farmacológico.
Se espera que la farmacogenética nos procure mejores herramientas para el tratamiento médico. Así, en un futuro la respuesta terapéutica será mejor en los dos sentidos principales: mayor tasa de curación y menor ratio de efectos secundarios negativos.
Este menor ratio de efectos adversos (toxicidad) se traducirá en un menor número de muertes y accidentes. También se acortarán los tiempos de tratamiento y hospitalización.
Aunque es cierto que la implementación de la farmacogenética requiere una inversión inicial – actualmente en el campo de la investigación -, supondrá un ahorro económico en el futuro, al reducir los ensayos fallidos. El esquema de terapia clásico, fundamentado en el método de “ensayo y error”, quedaría sustituido por otro capaz de predecir el resultado de antemano.
¿En qué se basa la farmacogenética?
La farmacogenética se sirve de análisis genéticos individualizados, es decir, de cada paciente. Estos análisis también aportan información sobre el metabolismo de la persona, ya que la síntesis de proteínas depende directamente del código genético.
Cuando un fármaco es administrado, éste es absorbido por el organismo, que lo metaboliza, transporta, degrada y expulsa. En cualquiera de estas fases, las variaciones genéticas que pudieran existir – por pequeñas que sean – ocasionarán la producción de una proteína distinta. Al ser, la proteína, distinta, también lo será su respuesta al interactuar con el fármaco.
Ramas de la farmacogenética
Como el recorrido de acción de los fármacos pasa por diferentes fases hasta que es expulsado del organismo, la farmacogenética se divide en subgrupos para facilitar su estudio. Los dos principales son:
- Farmacogenética del transporte de medicamentos: estudia la misión de los transportadores en la absorción, distribución y excreción de los fármacos. La mayoría de éstos actúan como una bomba de ATP que consume energía y que exporta el sustrato correspondiente al exterior de las células.
- Farmacogenética de receptores de medicamentos: estudia los polimorfismos en los receptores, es decir, las proteínas – generalmente – que se unen al fármaco.
Diferencias entre la farmacogenética y la farmacogenómica
“Farmacogenética” es un término que hace relación a los genes que determinan el metabolismo de los fármacos. De distinta manera, “farmacogenómica” hace relación a un concepto más amplio, que contiene también el de farmacogenética: se refiere a todos los genes del genoma que estén implicados en la respuesta al fármaco.
En otras palabras, la farmacogenética estudia únicamente la influencia de variaciones en el ADN en la respuesta a un fármaco; mientras que la farmacogenómica – que abarca también la farmacogenética – añade los efectos de variaciones en el ARN.
Históricamente, ambos términos se han utilizado indiferentemente con mucha frecuencia. Sin embargo, gracias a los avances notables de las últimas décadas, la farmacogenómica ha cobrado protagonismo en publicaciones científicas relevantes. Esto ha diferenciado claramente ambos términos, provocando que se manejen con más precisión.
El futuro de la farmacogenética
Resulta difícil predecir por dónde evolucionará la farmacogenética – y la farmacogenómica en general – en el largo plazo, porque es un área de estudio que está en auge. Sin embargo, algunos avances recientes permiten aventurar a decir cómo será en el futuro próximo: a través de tarjetas farmacogenéticas.
Estas tarjetas, diseñadas por científicos españoles, son un invento recién aparecido en el mercado. Con el tamaño y grosor de una tarjeta de crédito, estas tarjetas contienen información genética de su propietario. A través de un análisis genético a partir de sangre o epitelio bucal, se analizan los genes implicados en el metabolismo de los fármacos y se desarrolla una lista de medicamentos aconsejables para el sujeto.
Así, el titular de la tarjeta porta cómodamente una forma de compartir su información con todos los profesionales sanitarios, de manera que se facilita la prescripción más adecuada de fármacos.
Texto revisado por la Doctora Pilar Arca Miguélez, Responsable Científica de Ampligen