En los últimos años se ha disparado la realización de pruebas de ADN para conocer el potencial de rendimiento deportivo en deportistas.
El objetivo de éstas es doble: conocer las limitaciones que tendrá el cuerpo – porque no todo es cuestión de entrenamiento – y personalizar la preparación del deportista. En este sentido, no sólo se trata de elegir mejor los ejercicios físicos a realizar, sino también la dieta, hábitos, etc.
Inicialmente, estas pruebas nacieron para los deportistas de élite o aquellos que estaban construyendo una carrera profesional en este campo. Hoy en día, sin embargo, están al alcance del público general.
Qué información aporta el test de ADN para deportistas
El estudio de la muestra – sangre o saliva – no varía con respecto a otros test de ADN. Sin embargo, la búsqueda de la información aportada por la secuenciación genética es específica.
Según el laboratorio donde se encargue el servicio, los resultados finales abarcarán unos aspectos u otros. Entre ellos, lo habitual es que informen sobre:
Composición de las fibras musculares
Que pueden ser de distintos tipos. El test de ADN muestra qué tipo de fibras predominan en tu organismo.
- Lentas (tipo I): Si las fibras tienen un movimiento de contracción más lento, lo que les permite someterse al ejercicio durante más tiempo. Participan en actividades aeróbicas (intensidad baja, como andar).
- Intermedias (tipo II-A): A medio camino entre las lentas y las rápidas. Participan en la mayoría de ejercicios físicos propios de un gimnasio, por ejemplo.
- Rápidas (tipo II-B): Reaccionan a la orden de contracción con mucha velocidad, pero consumen mucha energía, lo que provoca su cansancio. Participan en actividades físicas exigentes, como los sprints.
Respuesta a la Hipoxia
El test indica si es eficiente someter al cuerpo (en especial, sangre y tejidos musculares) a falta de oxígeno. El beneficio obtenido por el entrenamiento en altura u obstruyendo parcialmente la circulación varía en cada persona y depende directamente de su genotipo.
Ejercicio cardiovascular recomendado
Según la información genética de una persona, puede ser más eficiente entrenar con ejercicios de cardio o hacer HIIT (Entrenamiento por Intervalos de Alta Intensidad, por sus siglas en inglés).
Además, estas pruebas de ADN también informan sobre la capacidad máxima de absorción de oxígeno, la frecuencia óptima de entrenamiento y el umbral de lactato.
De esta forma, se muestra un cuadro bastante completo que permite tanto conocer las limitaciones de un deportista como evitar fatiga no provechosa y optimizar su entrenamiento.
Cómo consiguen esa información las pruebas de ADN
Como hemos mencionado, según qué información concreta se busque dar en los resultados, se observará un segmento de la secuenciación u otro. Como norma general, en un test de ADN para deportistas se evalúan alrededor de treinta polimorfismos.
Algunos de los focos en estos estudios son:
La relación entre los genes ACE y ACTN3
El primero suele acompañar a los mejores deportistas en pruebas de resistencia (es el de la enzima conversora de angiotensina), mientras que el ACTN3 se ha visto relacionado con los velocistas (se le llama “Gen de la Velocidad”).
La activación o silenciación del gen productor de miostatina
Ya que ésta es una proteína (factor 8 de crecimiento) que se caracteriza por inhibir el crecimiento muscular.
Genes relacionados con la obesidad
Como el FTO; ya que para lograr un mayor rendimiento deportivo es necesario conocer los efectos sobre el organismo que tiene la ingesta de ciertos alimentos.
Diferentes estudios científicos han realizado una estimación del factor hereditario en el rendimiento deportivo. Éste parece situarse entre el 25 y el 75%.
¿Son fiables los tests de ADN de rendimiento deportivo?
La secuenciación a partir de la muestra es plenamente fiable. Donde puede haber más controversia es en la interpretación de los resultados.
Aunque hemos tratado de simplificar, la información genética es compleja, y muchos genes están relacionados entre sí para una misma función.
Es decir, tener un polimorfismo que dificulte la producción de miostatina no significa necesariamente que el sujeto vaya a generar más masa muscular. Esto es porque puede haber otro polimorfismo no estudiado que, de algún modo, contrarreste el primero.
Sin embargo, y teniendo esto en cuenta, estas pruebas de ADN sí ofrecen un marco general que, si bien pueden haber “ignorado” cierta información, sirven como guía más que fiable para orientar el entrenamiento.
Es una herramienta muy poderosa para la consecución eficiente de unos mejores resultados. No en vano la utilizan los deportistas de élite: las continuas mejoras en marcas mundiales demuestran su valor.
Texto revisado por la Doctora Pilar Arca Miguélez, Responsable Científica de Ampligen
